La autoestima es un sentido de satisfacción que viene de reconocer y apreciar nuestro propio valor, amándonos a nosotros mismos y creciendo. No es un término que incluya la comparación ni la competición. Con una autoestima alta aprendemos a reconocer y experimentar nuestro propio valor.
Es esencial para el bienestar psicológico y por ello hay que cambiar ciertos hábitos y acciones para recuperarla y elevarla.
Sin ella la vida puede ser muy dolorosa, no se satisfacen todas las necesidades y no se completa todo el potencial.
La baja autoestima es un concepto negativo de si mismo. Responde a la pregunta ¿Cómo me siento conmigo mismo? La clave para mejorar la autoestima es cambiar el modo en que interpretas tu vida: analizar las interpretaciones negativas que haces de los hechos y crear nuevos pensamientos y objetivos que fomenten el crecimiento de tu autoestima.
¿Por qué es tan importante tener una buena autoestima?
Tendrás más estabilidad emocional: cuando tienes una buena opinión de ti mismo no necesitarás la aprobación de los demás y no pensarás constantemente en qué piensan la gente de ti. En general, no te afectaran tanto los acontecimientos externos.
Obtendrás mayores logros: al levantar tu autoestima es más probable ir tras objetivos difíciles de alcanzar porque creerás que tienes la capacidad de conseguirlos y por tanto actuarás con más motivación.
Serás más atractiv@: las personas con una alta autoestima se sienten poco necesitadas y eso es atractivo. Las personas que se relacionen contigo sentirán una experiencia agradable y además les podrás aportar más.
Serás feliz: una de las bases de la felicidad es tener una buena autoestima. Puedes cumplir todas las condiciones que buscas pero si no te sientes bien contigo mismo no serás feliz.
Hábitos para una autoestima sana
1-Destruye a tu voz crítica
La principal responsable de una autoestima baja es la voz interior con la que nos decimos a nosotros mismos cosas negativas.
Si, todo el mundo tiene una voz crítica negativa, aunque unas personas son más conscientes que otras. Se trata de la voz con la que te dices pensamientos destructivos a ti mismo, como:
Nunca lo harás bien.
Eres peor que él/ella.
No le gusto a esa persona.
Lo importante aquí es no aceptar esos pensamientos y reemplazarlos por otros más positivos y que te ayuden a sentirte mejor.
Para ello, trata de atender a tus pensamientos y si observas alguno negativo, cuestiónatelo.
También puedes crear una palabra con la que pares el pensamiento destructivo cuando lo detectes: ¡PARA!
En resumen, se trata de ser consciente de tu voz crítica y no dejarse influenciar por ella, reemplazándo esos pensamientos por otros más constructivos.
2-No busques aprobación de los demás
Buscar la aprobación de los demás es algo que, si no somos conscientes, hacemos constantemente. Ejemplos:
Ponernos ropa pensando en si gustará a los demás.
Tomar decisiones importantes basadas en opiniones de los demás.
No decir nuestras opiniones porque pensamos que no agradaran a los demás.
Entonces, cuando vayas a hacer cualquier cosa o tomar una decisión, pregúntate si estas pensando en qué pensarán los demás, si estas actuando para que ellos se sientan satisfechos con tu comportamiento.
Una forma de trabajar este punto es mostrarse en contra de la opinión de alguien. Siempre de forma asertiva y educada.
3-Autoafirmaciones
Ya lo decía Muhammad Ali:
“Es la repetición de afirmaciones lo que guía a la creencia. Y una vez que esa creencia se convierte en una convicción profunda, las cosas comienzan a suceder”.
Las afirmaciones ayudarán a desarrollar tu autoestima y simplemente tendrás que repetirlas unas veces durante el día. ¿Ejemplo de autoafirmaciones?
-Me gusto a mi mismo y me acepto totalmente.
-No busco la aprobación de los demás.
-Soy una persona de valor y tengo derecho a ser feliz.
-Experimento sentimientos positivos constantemente.
Para que no se te olvide este hábito, puedes apuntar las frases que más te sirven en una tarjeta y leerlas por la mañana y al acostarte.
4-Haz deporte y cuídate físicamente
Si, es un hecho que nuestra apariencia física influye en nuestra autoestima. Con una buena forma, te verás mejor y subirá tu autoestima.
Si no estas acostumbrado a hacer ejercicio o ir al gimnasio, comienza poco a poco con 10-15 minutos diarios y ve aumentando el tiempo poco a poco. Verás que se convertirá en un hábito positivo con el que disfrutarás; recuerda que con el deporte liberas endorfinas (hormonas del bienestar).
5-Socializa
El apoyo social es uno de los amortiguadores más importantes del estrés. Las personas que te rodean sirven como apoyo emocional, para darte ayuda, para divertirte y de la que aprender. Eso si son gente con criterio y positiva. La gente negativa, probablemente disminuirá tu autoestima.
6-Haz una lista de tus logros
Esta acción es una de las que mejor funciona. A veces pensamos que no podemos lograr algo o que no tenemos la capacidad para ello. Por ejemplo:
-No podemos aprobar un examen.
-No podemos adelgazar.
Con una lista que te haga recordar tus logros anteriores, recordarás que tienes la capacidad para lograr lo que te propones. No tienen porque ser grandes logros como ganar un campeonato. Un ejemplo sería:
-He aprobado la carrera/formación profesional/preparatoria.
-He aprendido a jugar al tenis.
-He aprendido a leer inglés.
-Fui seleccionado para trabajar en mi actual puesto.
Pon tu lista en un lugar visible y léela a menudo. Eso hará que te hagas representaciones positivas y entres en un estado que aumente tu autoestima.
7-Haz una lista de tus cualidades positivas
Se generoso y sincero contigo mismo haciendo una lista de tus cualidades positivas más destacables. Si no sabes por donde empezar, pregunta a un amigo de confianza.Tienen que ser al menos 10 cualidades. Es normal si sientes que te cuesta hacer la lista porque la mayoría de las personas se enfoca en sus rasgos negativos y olvidan los positivos. Ejemplo:
-Soy trabajador.
-Se escuchar.
-Soy educado.
-Tengo una buena relación con mi familia.
-Estoy en forma.
-Soy empático.
-Soy amable.
-Soy abierto de mente.
-Soy responsable.
-Soy activo.
8-Para de ser perfeccionista
El perfeccionismo es uno de los rasgos más destructivos porque con el queremos ser algo inalcanzable y aunque mejoramos constantemente, nunca estamos contentos.
Además, al querer hacer todo perfecto te paralizarás al ver errores, lo dejarás todo para más tarde y no obtendrás ninguna clase de resultados. Todo ello conllevará a un descenso de tu autoestima.
¿Cómo dejar de ser perfeccionista?
-Ponte límites para finalizar las cosas: debido a que a veces tratamos de hacer todo perfecto, al final se pospone y nunca termina. Si te pones una fecha límite, te verás obligado a avanzar y a terminar las cosas.
-Cambia tus estándares: el perfeccionismo viene de la forma de pensar de “tiene que estar todo perfecto sin ningún fallo”. Sin embargo también puedes pensar de otra forma que también te llevará a obtener buenos resultados como “Voy a esforzarme en ello y lo haré lo mejor posible. Si cometo un error es normal y siempre puedo aprender de ello”.
9-Cuida tu lenguaje no verbal
Aquí me refiero tanto a tus expresiones faciales como tus posturas corporales. Sonreír y reír hará que te sientas más feliz y mostrar posturas de expansión (con los brazos abiertos y no encogidos) harás que te sientas con la autoestima más alta.
10-Acéptate
Este punto se resume en dos frases:
Si no te gusta algo, cámbialo. Si no puedes cambiarlo, cambia tu actidud-Maya Angelou.
Una vez que aceptamos nuestros límites, los atravesamos-Albert Einstein.
Frases sobre la autoestima
Dar a la gente autoestima es, de lejos, la cosa más importante que puedo hacer. Porque entonces actuarán-Jack Welch.
El optimismo es la fe que guía al logro. Nada puede ser logrado sin esperanza y confianza-Helen Keller.
La salud es la posesión más grande. El compromiso el mayor tesoro. La confianza el mayor amigo-Lao Tzu.
Desear ser otra persona es malgastar la persona que eres-Anónimo.
La adversidad y la perseverancia son cosas que te pueden formar. Pueden darte un valor y autoestima que no tienen precio-Scott Hamilton
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